A partir del 3 de noviembre de 2025, Mozilla dará un paso importante hacia una mayor transparencia: todas las nuevas extensiones de Firefox deberán declarar de forma clara si recopilan o comparten datos de los usuarios. Con esta medida, la organización busca reforzar la confianza de quienes usan el navegador y darles más control sobre su privacidad.
Mozilla ha presentado un nuevo marco de privacidad para las extensiones que cambia la forma en que los desarrolladores deben manejar la información del usuario. Desde esa fecha, cualquier complemento enviado a la plataforma oficial —addons.mozilla.org— deberá incluir un nuevo campo dentro de su archivo de configuración, el manifest.json, que especifica si recopila datos personales o no. Incluso si una extensión no recoge absolutamente nada, tendrá que indicarlo expresamente con la etiqueta correspondiente.
En palabras más simples: ya no bastará con decir “no hacemos nada raro”. Ahora será obligatorio dejarlo por escrito en el código y visible para el usuario.
Mayor transparencia para el usuario
Una de las novedades más destacadas es que esta información no quedará oculta en algún rincón técnico. Firefox mostrará de forma visible si una extensión recopila o comparte datos durante la instalación, en su página de listado dentro de addons.mozilla.org y también en la sección “Permisos y datos” de la página de extensiones del navegador (about:addons).
Esto significa que, antes de instalar cualquier nuevo complemento, podrás ver de un vistazo qué hace con tus datos. Nada de sorpresas después.
Solo para nuevas extensiones... por ahora
Mozilla aclaró que esta nueva política se aplicará inicialmente solo a las nuevas extensiones, no a las actualizaciones de las que ya existen. Sin embargo, hay un matiz importante: si un desarrollador decide incluir la nueva clave de recopilación de datos en cualquier versión, todas las versiones posteriores deberán mantenerla. Si no lo hacen, esas extensiones serán bloqueadas y no podrán publicarse ni recibir firma de seguridad hasta que se corrija la omisión.
En otras palabras, Mozilla quiere asegurarse de que esta práctica se convierta en un estándar estable y no algo que pueda ignorarse con facilidad.
Compatibilidad con versiones anteriores
El nuevo marco también afecta al manejo de versiones antiguas de Firefox. Los desarrolladores que todavía mantengan compatibilidad con versiones anteriores a la 140 en escritorio o la 142 en Android deberán ofrecer a los usuarios una manera clara y manual de gestionar la recopilación de datos justo después de la instalación. De este modo, incluso quienes usen versiones más viejas del navegador tendrán opciones de control.
Una transición en dos fases
Mozilla ha dejado claro que esto es solo la primera etapa de un plan más amplio. Durante la primera mitad de 2026, la política se extenderá a todas las extensiones, tanto nuevas como ya existentes. Es decir, llegará un momento en que absolutamente todos los complementos de Firefox deberán informar sobre el manejo de datos.
La organización prometió dar a los desarrolladores “suficiente aviso” antes de aplicar la medida definitiva, además de ofrecer nuevas herramientas que faciliten la transición. La idea no es solo imponer una norma, sino también hacer que adoptarla sea lo más simple posible para todos.
Una apuesta por la confianza
Con este movimiento, Mozilla reafirma su papel como una de las pocas grandes organizaciones tecnológicas que sigue poniendo la privacidad del usuario en primer lugar. En una época donde muchas aplicaciones y navegadores tratan los datos personales como moneda de cambio, Firefox busca destacar por la transparencia.
En resumen, esta nueva política no solo beneficia a los usuarios, que ahora sabrán exactamente qué datos se recogen y con qué propósito, sino que también marca un nuevo estándar para el ecosistema de extensiones. Un paso más hacia una web más honesta, donde la privacidad no sea una promesa, sino una práctica real.
Fuente: Linuxiac
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